Usted…¿para qué sirve?

En el siguiente artículo, el escritor italiano Umberto Eco ( 5 de enero de 1932- 19 de febrero de 2016) escribió una reflexión interesante sobre aspectos del Internet que no necesariamente conllevan dulcura y suavidad en la relación académica entre el que aprende y el que enseña.

¿De qué sirve un profesor en la segunda década del siglo XXI?

 Umberto Eco

Un estudiante, para provocarme, me dijo: “Disculpe, pero en la época de Internet, usted, ¿para qué sirve?”

El estudiante decía una verdad a medias, que, entre otros, los mismos profesores dicen desde hace muchos años, y es que antes, la escuela debía transmitir información, sobre todo nociones, desde las tablas de multiplicar en la primaria, y cuál era la capital de Egipto en la secundaria. Con la aparición, no digo de Internet, sino de la televisión e incluso de la radio, y hasta con la del cine, gran parte de estas nociones empezaron a ser absorbidas por los niños en la esfera de la vida extraescolar.

De pequeño, mi padre no sabía que Hiroshima quedaba en Japón. Yo, que soy de la época de la guerra, aprendí esas cosas de la radio y las noticias cotidianas, mientras que mis hijos han visto en la televisión cómo las abejas polinizan las flores, cómo era un Tyrannosaurus rex y finalmente un niño de hoy sabe mucho sobre el ozono,  sobre las mafias de narcotraficantes, y muchas otras cosas más. Tal vez, un niño de hoy no sepa qué son exactamente las células madre, pero las ha escuchado nombrar, mientras que en mi época de eso no hablaba siquiera la profesora de ciencias naturales. Entonces, ¿de qué sirven hoy los profesores?

He dicho que el estudiante que me preguntó “…usted, ¿para qué sirve?”dijo una verdad a medias, porque ante todo un docente, además de informar, debe formar. Lo que hace que una clase sea una buena clase no es que se transmitan datos y datos, sino que se establezca un diálogo constante, una confrontación de opiniones, una discusión sobre lo que se aprende en la escuela y lo que viene de afuera. Es cierto que lo que ocurre en Siria lo dice la televisión, pero por qué algo ocurre ahí y no en Groenlandia, es algo que sólo lo puede decir la escuela.

Los medios de difusión masivos informan sobre muchas cosas y también transmiten valores, pero la escuela debe saber discutir la manera en la que los transmiten, y evaluar el tono y la fuerza de argumentación de lo que aparecen en diarios, revistas y televisión.

Pero el estudiante no me estaba diciendo que ya no me necesitaba porque ahora existían la radio y la televisión para decirle en qué parte del mundo está Siria o qué hacen las bombas químicas, es decir, no me estaba diciendo que mi rol era cuestionado de manera casual y desordenado cada día en diversos medios. El estudiante me estaba  diciendo que hoy existe Internet, la Gran Madre de todas las enciclopedias, donde se puede encontrar Siria y la capacidad de destrucción de las bombas químicas.

Me estaba diciendo que la información que Internet pone a su disposición es inmensamente más amplia e incluso más profunda que aquella de la que dispone el profesor. Y omitía un punto importante: que Internet le dice “casi todo”, salvo cómo buscar, filtrar, seleccionar, aceptar o rechazar toda esa información.

Almacenar nueva información, cuando se tiene buena memoria, es algo de lo que todo el mundo es capaz. Pero para decidir qué es lo que vale la pena recordar y como procesarla se necesita del maestro.

El problema dramático es que a veces ni siquiera el profesor sabe enseñar el arte de la selección, al menos no en cada capítulo del saber. Pero por lo menos sabe que debería saberlo, y si no sabe dar instrucciones precisas sobre cómo seleccionar, por lo menos puede ofrecerse como ejemplo, mostrando a alguien que se esfuerza por comparar y juzgar cada vez todo aquello que Internet pone a su disposición. Y también puede poner cotidianamente en escena el intento de reorganizar sistemáticamente lo que Internet le transmite en orden alfabético, diciendo que las reseñas y los resúmenes, las noticias y los comentarios, son textos distintos que no deben confundirse.

El sentido de esa relación sólo puede ofrecerlo la escuela, y si no sabe cómo, tendrá que equiparse para hacerlo. Si no es así, el Internet y la tecnología digital moderna seguirán siendo solamente la primera parte de un rebuzno de asno que no asciende al cielo.

Fuente: http://www.lanacion.com.ar/910427-de-que-sirve-el-profesor

COMENTARIOS AL ARTÍCULO DE UMBERTO ECO:

Christos Crisostomo.

Yo le hubiera contestado a ese alumno: Los profesores servimos para precisamente decirte cómo debes usar el internet para que le saques provecho, lo que nos hemos olvidado todos, es que el Internet siempre existió, pero con otro nombre: enciclopedia, información, libros, manuales, diccionarios, y un largo etc., es decir, todo soporte impreso , y aún antes que se inventara la escritura y la imprenta, el Internet es solo tecnología que ha terminado en globalización, el Internet no ha inventado nada, sólo lo ordena y lo clasifica de manera rápida y eficaz, pero, siempre hay un pero, hay mucha basura en el Internet, así como la hay en los soportes tradicionales, y, los profesores, modestia aparte, podemos sugerir cómo usar esa información para «provecho» de los alumnos,repito, sugerir, no somos infalibles y por último todos pueden hacer con el Internet lo que les viene en gana, así como hicieron lo que les vino en gana con la tecnología tradicional, total ¿para qué servimos los profesores? ..si tanto hoy, como antes, los chicos nos hicieran caso, el mundo sería otro.

Reply · Like · 21 · Follow Post · January 26 at 11:16am

Santiago Moisés Rojas Paz ·  Top Commenter · UPAEP

En tiempos del Internet, el maestro es mas importante, a los alumnos se les debe enseñar a pensar y no a copiar y pegar…

Reply · Like · 16 · Follow Post · February 2 at 4:06pm

Liliana Balanta Castañeda . Coordinadora Administrativa at ERGOESTILOS

Para muchos profesores es difícil hacer un cambio en sus metodologías tradicionalistas. El maestro real debe darse cuenta que debe modificar muchas de sus formas de enseñanza, ahora es necesario ser más un guía que un transmisor de información y conocimientos, empezar a dejar de presionar con notas y bajarse del pedestal de poder en el que se instauró desde hace muchos siglos. Yo soy maestra y creo que la educación es de las profesiones más hermosas que pueden existir que brinda un sin fin de oportunidades para interactuar con los chicos(as) que nos llegan a las manos. Formar para la vida es una de las opciones que tenemos como maestros(as). Cuando un estudiante cuestiona a su maestro es una oportunidad de cambio y de aprendizaje, más que entenderlo como una confrontación. Vamos maestros, los invito a reflexionar un poco más sobre el asunto.

Reply · Like · 3 · Follow Post · March 25 at 10:06am

 

Acerca de humbertocueva

Humberto Cueva García se tituló en la Escuela Normal “Miguel F. Martínez” de Monterrey, NL. Profesor de escuelas primarias y secundarias, tiene grado de maestría en Español por la Escuela de Graduados de la Normal Superior , en la cual ha impartido cursos de didáctica y literatura contemporánea. Asesor técnico-pedagógico de la aplicación y seguimiento del Programa de Español en escuelas secundarias de Nuevo León . Desde 1992 es autor de libros de texto de Español para primaria y secundaria editados por la Editorial Trillas. Conductor de talleres de actualización docente a nivel nacional y regional invitado por la SEP de 2006 a la fecha.
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